miércoles, 25 de mayo de 2011

El ballet es una canción del cuerpo, tanto de alegría como de dolor.

Un  pasión, un objetivo en la vida, llegar a ser una bailarina profesional, una bailarina reconocida, una primera bailarina.
Ese sueño que tienes desde los 3 años. Tú ni siquiera sabías lo que era, pero tu madre te apuntó, oías mil palabras raras relacionadas con eso, y no entendías nada, pero poco a poco llendo a las clases, te vas dando cuenta de que es lo que quieres hacer siempre, que a pesar de todo el sacrificio que conlleve quieres hacerlo, poco a poco vas madurando, vas teniendo mas disciplina para ello.
Hay muchísimos momentos de bajón, los tienes, llegas a tu casa llorando, día tras día durante un tiempo, un día tienes una conversación con tu profesora, y a la mañana siguiente, te sientes fuerte, enérgica para darlo todo, Y LO DÁS.
La sensación de satisfacción, es lo mejor que hay.
Y llega un momento , en el que te das cuenta también de que no estás llegando nada, que estás dando vueltas en círculo, que no evolucionas, que no te sale nada, y estas negativa, pesimista..y te dices: - Lo dejo, esto no es lo mío. Y se lo dices a esa persona que estaba ahí cuando la necesitabas,(a parte de tu madre) tu maestra, y ella lo acepta y te aconseja, y acabas el año estupendamente, relajada, y bua! BESTIAL.
Y al año siguiente empiezas también perfectamente porque has vuelto y no lo vas a dejar más.
Pero vuelves a caer, y ya no te lenvantas,te vas quedando si ganas y vuelves a pensar lo mismo, que no tienes futuro, que necesitas elegir otro camino..
Y definitivamente ya no vuelves, y van pasando los días, y a veces pasa por tu mente un: joder, ahora tengo fuerzas, me encantaría volver, pero luego te dices: - pero si voy a volver a caer, no, eso no es lo mio. Estoy casi segura de que me hubiera pasado eso si hubiera vuelto, hay veces que estas en tu casa y haces un equilibrio o algo, y descubres, madre mia si haces esto, y lo otro te sujetas la mar de bien! Si ahora mismo estuviera en clase sabría lo que hay que hacer. Cosa que tu profesora te ha repetido mil veces, pero hay que descubrirlo.
Yo sabía que tenía condiciones, lo sabía, pero también sé, que soy la ley del mínimo esfuerzo, y que quizás me rajé por eso, porque quiero conseguirlo todo, sin pasar por el sufrimiento que conlleva(aunque también muchas alegrias). En fín, estoy orgullosa de mis 10 años tomando clases y aprendiendo, y doy las gracias a esa persona, que con su dureza, disciplina, cariño, y bromas,  a hecho de mí, lo que yo soy ahora. Sin duda, ella, una MAESTRA excelente, es un ejemplo a seguir.
EL BALLET ES Y SEGUIRÁ SIENDO MI PASIÓN. Lo siga haciendo o no, lo amaré siempre.

Natalia Makarova


Mijaíl Baryshnikov

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario